En muchas ocasiones cuando vemos una sopa, pensamos en que es una comida de
hospital, Puede que sea porque lo asociamos a un alimento sano que se presenta
con sencillez y pensando en ofrecer un plato beneficioso para la salud. Sopas y
purés son comidas muy saludables y socorridas para el invierno porque ayudan a
entonar el cuerpo y entrar en calor. Hidratan y ofrecen nutrientes compensados
y fáciles de ingerir. Pero no resultan menos interesantes para el verano, eso
sí, frías. Estos alimentos líquidos constituyen recetas estivales sanas: en su
elaboración se emplean verduras y frutas de temperada como ingredientes
principales. Además, son ideales para contrarrestar las altas temperaturas y
perder peso, al ser bajas en calorías.
En la cocina internacional presumen de tener amplia variedad de sopas calientes y frías, sin embargo, la cocina española hace gala de algunas de las más sabrosas y populares sopas frías que existen, no en vano obtienen gran aceptación alrededor del mundo. Gazpacho, salmorejo o ajo blanco son algunas de las más conocidas.
En la cocina internacional presumen de tener amplia variedad de sopas calientes y frías, sin embargo, la cocina española hace gala de algunas de las más sabrosas y populares sopas frías que existen, no en vano obtienen gran aceptación alrededor del mundo. Gazpacho, salmorejo o ajo blanco son algunas de las más conocidas.